El 22 de setiembre, un día después de la llegada de la primavera, se realizó el tercer Foro del LiMiGeBe, en el lugar de costumbre.
Luego de la acostumbrada introducción de un emocionado Edgardo Decorte, dio comienzo la charla de Juan Carlos Albanese (9ª) sobre el General Manuel Belgrano, Patrono de nuestro Liceo.
Un sector de la Concurrencia.
Como comienzo el disertante propuso el cambio de nombre del Foro, llamándolo directamente Foro General Belgrano.
A continuación hizo una reseña de la vida de Don Manuel José Joaquín del Corazón de Jesús, dando comienzo por su ascendencia, siendo su padre un comerciante italiano, Don Domingo Cayetano Belgrano Peri, nacido en Oneglia, de buena posición económica, casado con una ilustre dama santiagueña, Doña María Josefa Gonzalez Casero.
Continuó con sus estudios primarios y secundarios en colegios de Buenos Aires, donde ya desde temprana edad, dió muestras de su capacidad intelectual y talentos personales. Los padres Dominicos lo calificaron como responsable en sus estudios, rápido en su entender, honesto en su pensar, claro en su decir, digno en todos sus actos y recio en su conducta. Rasgos éstos a los que –al decir de Albanese- hizo honor durante toda su vida agregando, por si fuera poco, su acendrado patriotismo y su desinterés que lo llevo a morir en la pobreza.
Continuó con sus estudios primarios y secundarios en colegios de Buenos Aires, donde ya desde temprana edad, dió muestras de su capacidad intelectual y talentos personales. Los padres Dominicos lo calificaron como responsable en sus estudios, rápido en su entender, honesto en su pensar, claro en su decir, digno en todos sus actos y recio en su conducta. Rasgos éstos a los que –al decir de Albanese- hizo honor durante toda su vida agregando, por si fuera poco, su acendrado patriotismo y su desinterés que lo llevo a morir en la pobreza.
Siguió relatando que a los 16 años fue enviado a España, en compañía de su hermano 1 año menor a estudiar comercio internacional. Llegado a Madrid a la casa de una hermana comunicó a su padre que había cambiado su designio para dedicarse al estudio de las leyes.
Completado sus estudios de licenciado en derecho en Salamanca primero y de abogado en Valladolid después, decidió no doctorarse ya que eso le llevaría tiempo que su patria necesitaba y que él resolvió dedicarle, por lo que volvió a Buenos Aires, logrando previamente el nombramiento de Secretario Permanente del Consulado en Buenos Aires.
El disertante continuó relatando acerca de sus avanzados conocimientos, a los cuales había accedido a través de la lectura de autores prohibidos para la época, como lo fueron los iluministas Voltaire, Montesquieu, Rosseau,etc.(a los que ya había conocido a través de la cátedra en Salamanca de Campomanes y Jovellanos) y para lo cual había sido autorizado por Pío VI gracias a la brillantez de sus pensamientos y a sus dotes personales.
El disertante continuó relatando acerca de sus avanzados conocimientos, a los cuales había accedido a través de la lectura de autores prohibidos para la época, como lo fueron los iluministas Voltaire, Montesquieu, Rosseau,etc.(a los que ya había conocido a través de la cátedra en Salamanca de Campomanes y Jovellanos) y para lo cual había sido autorizado por Pío VI gracias a la brillantez de sus pensamientos y a sus dotes personales.
El renunciamiento y sacrificio que significó hacerse cargo de la Expedición al Paraguay a pesar de no ser militar, carrera ésta que continuó más tarde al frente del Ejercito del Norte, sus derrotas de Vilcapugio y Ayohuma y las victorias de Tucumán, Salta y Las Piedras.
Nos interiorizó también de su vida privada, del deterioro de su salud y por fin de su muerte a la temprana edad de cincuenta años.
Por último mencionó sus obras como fueron la creación de la escuela de náutica, la de dibujo, la de matemáticas, de agricultura, técnica para mujeres, etc., para finalizar poniendo nuevamente de manifiesto sus virtudes, su desinterés y entrega a la libertad de nuestra patria.
Cuando ya las presencias raleaban, luego de las 15,30 horas y luego de tomar el café hicimos el acostumbrado brindis y partimos mas liceístas que nunca, después de haber departido con quienes tenemos las mismas raíces y la misma esencia y lleno nuestro recuerdo de no solo uno de nuestros máximos próceres sino de un ser humano tan impoluto y desinteresado en aras de la grandeza de su patria, y pensando - tal vez - la falta que haría en éstos días.
El mago Calderini y sus divertidos trucos
Cuando ya las presencias raleaban, luego de las 15,30 horas y luego de tomar el café hicimos el acostumbrado brindis y partimos mas liceístas que nunca, después de haber departido con quienes tenemos las mismas raíces y la misma esencia y lleno nuestro recuerdo de no solo uno de nuestros máximos próceres sino de un ser humano tan impoluto y desinteresado en aras de la grandeza de su patria, y pensando - tal vez - la falta que haría en éstos días.
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