viernes, 30 de mayo de 2014

RECUERDO DE HECTOR PAILLET

Hola Juanca! 

No es solo por pereza, también anduvimos atareados con mi esposa con varias cosas juntas, afortunadamente todas lindas. 

Y salimos de esas y volvimos con la obra de la Capilla San Benito, también a Dios gracias va adelantando con la ayuda de toda la comunidad y muchos amigos.(BRAVO QUERIDO AMIGO!!)

Seguramente vos lo tendrás presente, involucró a un docente (de cuyo nombre no quiero acordarme diría el Quijote) y un cadete de primero. El cadete de marras preguntó a uno de la novena, creo que estábamos en segundo año recién, como se llamaba el citado personaje porque el preceptor se lo había señalado para pedirle algo, pero no le había dicho el nombre. Cuando nuestro amigo vio a quien se refería le dijo, muy suelto de cuerpo, se llama Sapón! 

Y allá fue el infortunado a pedir lo que le habían indicado  al Sr. Sapón, quien no quedó muy contento con las explicaciones del pobre cadetorio.
En materia de vivencias, creo que lo que más recuerdo de mi primer año eran los miércoles, día de visita, de descanso a la tarde con la presencia de mi madre quien siempre traía alguna golosina. Éramos chicos! y el poder estar una tarde compartiendo con las familias que llegaban hacía más cálido el patio de armas. Y en especial para quienes no tenía familiares en la ciudad y se arrimaban a las familias de los locales para compartir una hora distinta.

Un gran abrazo

GRACIAS QUERIDO AMIGO.
LOS NOVENEROS MUY AGRADECIDOS POR TU COLABORACION

lunes, 26 de mayo de 2014

SEMANALIDAD - NESTOR PERESON




“yo rogaré al Padre, y él les dará…”
Juan 14, 16
Un hombre que tenía un grave problema de miopía se consideraba un experto en evaluación de arte. Un día visitó un museo con algunos amigos. Se le olvidaron los lentes en su casa y no podía ver los cuadros con claridad, pero eso no lo detuvo de ventilar sus fuertes opiniones.
Tan pronto entraron a la galería, comenzó a criticar las diferentes pinturas. Al detenerse ante lo que pensaba era un retrato de cuerpo entero, empezó a criticarlo. Con aire de superioridad dijo: “El marco es completamente inadecuado para el cuadro. El hombre está vestido en una forma muy ordinaria y andrajosa. En realidad, el artista cometió un error imperdonable al seleccionar un sujeto tan vulgar y sucio para su retrato. Es una falta de respeto”.
 El hombre siguió su parloteo sin parar hasta que su esposa logró llegar hasta él entre los invitados a la muestra. lo apartó discretamente para decirle en voz baja: “Querido, estás mirando un espejo”
 “…el Espíritu de la Verdad”
Juan 14, 17

Muchas veces son nuestras faltas, las cuales tardamos en reconocer y admitir, parecen muy grandes cuando las vemos en los demás. Debemos mirarnos “en el espejo de la verdad”  más a menudo, observar bien para detectarlas, y tener el valor moral de corregirlas. Es más fácil negarlas que reconocerlas, por eso es necesario hacer a un lado el orgullo pues solo con humildad y verdad podremos ver nuestros defectos y corregirlos.

Gracias Néstor!!!