sábado, 4 de julio de 2015

Un día antes de las elecciones



Quedamos en encontrarnos en el barcito que está en Saenz y Ventura de la Vega. Como viajo en la línea bandera de Pompeya, el 42, llego siempre antes del tiempo previsto.

Es una maravilla ver pasar los semáforos en rojo, cosa que a los peatones los atemoriza, pero que vamos a hacer, acaso no estamos en Argentina, recordar que la línea 42 nace en la ciudad universitaria, donde no se puede llegar tarde o te perdés gran parte del espectáculo porno que con seguridad en ese momento se está desarrollando y además es absolutamente gratuito.

Eso conlleva a que la cantidad de público que allí se dirige sea considerable, gente de todas las edades afanosas de adquirir cultura, cosas inimaginables. Nunca nos hubiéramos imaginado la importancia del micrófono en la sociedad actual. Bien hace ésta gente en difundirlo.

Lo que es el arte, comentábamos con Néstor una vez que arribara, por supuesto que mi gran amigo se mueve en otros medios de locomoción. En ésta oportunidad apareció en una Kawasaki 1.000!!

Moto grandota si la hay. – No tenés miedo que te asalten nada más que para afanarte esa maravilla?, - le pregunto. Mirá querido amigo,- me responde con su característica y proverbial tranquilidad - Esta máquina está equipada con todo lo que hace falta para terminar con éstos extraterrestres.

Se autodestruye en 15 segundos provocando una gran explosión accionando éste pequeñísimo control remoto que guardo en el guante en el dedo meñique de la mano izquierda, ésto sucede en caso de fallar lo que te detallo a continuación.

El que no la conoce y se sienta en ella con seguridad será seriamente herido en sus genitales por un cuchillo muy delgado y filoso que se esconde en el asiento. En fin también posee otros adicionales de fábrica que la hacen inexpugnable e inafanable,ja,ja.

Para tu tranquilidad te comento que no solo me acordé de traer la llave, sino que hice una más para que los despistados como vos tengan una en su llavero.

Mañana votamos JC, ni me aclarés a quien votarás, lo doy por supuesto.-Y sí, lo comentamos tantas veces. Lo que no me imagino es a que hora se cerrarán los comicios dado lo dificultoso que es el tema electrónico.

 Yo probé y siempre me salía la cara del presidente de la linea aérea!! Y qué corresponde en esos casos?-pregunté, aclarando que lo hacía por el antecedente de la votación en La Florida en USA, te acordás? – Creo que lo más expeditivo es echarle agua por alguna ranura, ja,ja.

Bueno qué te parece si vamos a la Redacción, hay tantas cosas por acomodar, papeles por tirar,etc. – Mirá JC lo más importante es ir primero por las acostumbradas medialunas y luego entrar en calor con unos buenos amargos. Dale subite a la moto que te llevo.- Pará le sacaste el aparatito filoso?

Mirá el arranque es electrónico. Sería muy pesado darle con el pedal. Coloca Néstor la llave y un ruidazo se extiende por toda la Avda. Saenz, lo que hace apartar a la gran cantidad de público que observaba extasiado la maravilla de moto propiedad de nuestro amigo.

Dado la gran cantidad de baches que existen en nuestro querido Pompeya la velocidad no podía ser excesiva lo que ponía de mal talante a Néstor. La máquina ésta sufre yendo despacio JC – pero Néstor a mi se me está desflecando la campera, vamos a más de 140!!!!

Te voy a contar una infidencia.Pero jurame que mantendrás silencio a muerte, me dice Néstor, prometido - le digo cruzando los dedos mayor e índice de mi mano derecha, una vez que había mos ingresado en la Redacción y a punto de sorber el primer mate.


Te adelanto que se trata de alguien a quien vos querés mucho. – Bueno dale no me intrigués más. Te cuento que.........y precisamente en ese instante se escucha el motor de la K1000 ponerse en marcha en la puerta. Néstor te afanan la moto!! Salimos corriendo y ya había traspasado la esquina con gran melena al vuelo uno de los que estaban antes admirándola. Se imaginan que la anécdota quedó para otro día........

1 comentario:

Héctor dijo...

seguro que las criadillas del que robó la moto la hicieron ayer a la parrilla, je!